¿Qué somos? Si buscamos parecernos a los que nos han dado testimonio de su fe, diremos que poca cosa. Pero si realmente estamos dispuestos a ser humildes, lo primero que debemos hacer es auto convencernos de que nada somos. Lo que sepamos, tengamos o valgamos no nos pertenece porque nos ha sido otorgado gratuitamente. Y no nos lo merecíamos. Porque no somos dignos de ello.
Jesús nos salvó en la cruz. En ella se inmoló por nuestras faltas. Por eso, el madero en el que fue sacrificado es el símbolo