En julio, desde hace tres años, nuestra parroquia participa en los campamentos diocesanos, que tienen lugar en la casa de espiritualidad de Trayamar.
Tras un año de catequesis, talleres, encuentros… terminamos el curso reuniéndonos con otras parroquias de Málaga y pasando unos días llenos de vivencias. Los niños disfrutan mucho, reciben catequesis y celebran su fe, hacen talleres de manualidades, vamos a la playa… Tanto los niños de primaria como de secundaria forman parte de esta experiencia y hacen amistades que de un año a otro van aumentando.
Los jóvenes de la parroquia participamos como monitores y catequistas. Para nosotros son también unos días muy intensos, pero también nos beneficiamos de las experiencias de otros catequistas y aprendemos los unos de los otros.
En definitiva, es una experiencia enriquecedora tanto para los niños como para los jóvenes que estamos deseando cada año que llegue.
Mariví, catequista de adolescentes