En Cagliari, en Cerdeña, Italia, san Ignacio de Laconi, religioso de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos, quien por plazas y tabernas del puerto pedía incansablemente limosnas para socorrer las miserias de los pobres. También instruía a los niños, confortaba a los enfermos y a los pecadores les instaba a que hicieran penitencia. Observó puntualmente la regla franciscana y fue ejemplo de obediencia a sus superiores. († 1781).
Otros santos del día:
• En Bizacena, hoy en Túnez, san Mayulo, mártir en Adrumeto, que fue condenado a ser devorado por las fieras († s. II/III).
• En Roma, en el vigésimo segundo miliario de la vía Salaria, san Antimo, mártir († s. III).
• En Bizancio, actualmente Estambul, en Turquía, san Mocio, presbítero y mártir.
• En Vienne, en la Galia Lugdunense, hoy en Francia, san Mamerto, obispo, que, con motivo de una inminente desgracia, instituyó en esta ciudad unas solemnes letanías para el triduo preparatorio de la fiesta de la Ascensión del Señor († hacia el año 475).
• En Varennes, de la región de Langres, también en la Galia, actualmente en Francia, san Gangulfo († s. VIII).
• En Souvigny, de Borgoña, hoy también en Francia, san Mayolo, abad de Cluny, quien, firme en la fe, seguro en la esperanza y repleto de una doble caridad, renovó numerosos monasterios de Francia e Italia († 994).
• En el monasterio de Esterp, cerca de Limoges, en la Galia, Francia, san Gualterio, presbítero y superior de los canónigos, el cual, después de haberse ejercitado desde su infancia en el servicio de Dios, resplandeció por su mansedumbre para con sus hermanos y por su caridad hacia los pobres († 1070).
• En Verucchio, cerca de Forlí, actualmente en la Emilia-Romaña, región de Italia, beato Gregorio Celli, presbítero de la Orden de los Ermitaños de San Agustín, de quien se dice que, después de haber sido rechazado por sus hermanos de religión, se retiró al monte Carnerio con los Hermanos Menores, en donde murió († 1343).
• En York, en Inglaterra, beatos Juan Rochester y Jacobo Walworth, presbíteros y monjes de la Cartuja de Londres, los cuales, durante el reinado de Enrique VIII, por haberse mantenido fieles a la Iglesia, fueron suspendidos con cadenas de las almenas de la muralla de la ciudad hasta que murieron († 1537).
• En Nápoles, de la Campania, región de Italia, san Francisco de Jerónimo, presbítero de la Compañía de Jesús, que se dedicó a predicar misiones populares y al servicio pastoral de los marginados († 1716).
• En Saigón, en Conchinchina, actualmente en Vietnam, san Mateo Lê Van Gâm, mártir, que fue detenido por introducir con su pequeña embarcación a los misioneros europeos y, al cabo de un año transcurrido en la cárcel, fue decapitado por orden del emperador Thiêu Tri († 1847).
• En Córdoba (Argentina) beato Mamerto Esquiú, religioso de la orden de los Frailes Menores y obispo de Córdoba, que contribuyó a la convivencia y a la concordia social tanto en su etapa como política como en la episcopal († 1883).
• En Roma, beato Ceferino Namuncurá, indígena araucano de Argentina, aspirante al sacerdocio († 1905). La fiesta religiosa se celebra el 26 de agosto, día de su nacimiento.
(Del Martirologio Romano)