Hemos comenzado el curso con una convivencia parroquial en el Seminario de verano de Granada, en Sierra Nevada. El tema de fondo de nuestras reflexiones ha sido la encíclica del papa Francisco Laudato si’, sobre el cuidado de la naturaleza.
Comenzamos el 6 de octubre de 2017 nuestra ida al Seminario de Sierra Nevada que conocemos familiarmente como Hotel del Duque. En esta primera tarde, en la que aun no estamos todos, nos reunimos reavivando las aventuras y recuerdos que tenemos de este lugar. Compartimos la cena y agradecimos al Señor estos días que nos regala de encuentro, reflexión y disfrute.
Posteriormente tuvimos una oración familiar. Concluimos con una tertuliar, disfrutamos entre charlas y curiosidades y, poco a poco, nos retiramos a descansar.
El sábado comienza con la Eucaristía y un buen desayuno, cargando energía para realizar una ruta por los alrededores. Conforme realizamos este espléndido camino a través de los pinos y veredas, se van uniendo los demás miembros de la familia parroquial, que llegan en esta mañana. La ruta transcurre tranquila, incluido un curioso encuentro con un pastor aledaño de la zona. Observamos el entorno que nos rodea y la naturaleza en la que tan bien nos encontramos. Una vez que volvemos al Duque, realizamos nuestro particular piscolabis para proceder a comer y tomarnos un tiempo de descanso.
Por la tarde nos reunimos para reflexionar acerca de este maravilloso entorno, nuestra tierra, cómo el Creador la hizo y qué estamos haciendo con ella; qué mejor lugar que donde nos encontramos para darnos cuenta de esto. Terminamos con una oración, recordando las palabras del Papa: “María, la madre que cuidó a Jesús, ahora cuida con afecto y dolor este mundo herido”.
Ya bien entrada la tarde nos centramos en relajarnos con un partido de fútbol incluido y gran éxito de los “adultos” aunque siempre con el triunfo de la familia. Por la noche después de la cena una oración de buenos sentimientos y agradecimientos para, finalmente, y ya en tono distendido, unos animados pasos de baile en el salón del Duque para quien se atreviese.
La última jornada, después de nuestra Misa del domingo y el desayuno, se desarrolla visitando a la Virgen de las nieves en la cumbre de Sierra Nevada. Este lugar es un punto de peregrinación al que siempre acudimos cuando estamos en el Duque, pudiendo contemplar sus maravillosas vistas de la montaña y el valle.
Por la tarde, vamos volviendo a Málaga con los recuerdos de esta convivencia en la que, aunque la familia parroquial no estaba completa, si estaban presentes los recuerdos y experiencias que, no solo aquí, sino en otras muchas oportunidades, compartimos como Iglesia de Dios que peregrina en esta comunidad de la Parroquia de San Pedro.
José Lorite
Grupo de jóvenes. Coordinador de la convivencia.