En Cizico, en el Helesponto, hoy en Turquía, san Mirón, presbítero y mártir, que, según una tradición, durante el imperio de Decio y bajo el prefecto Antípatro, fue decapitado tras sufrir muchos tormentos (s. III).
Otros santos del día:
- En Cesarea de Capadocia, hoy Kayseri, en Turquía, san Mamante o Mameto, mártir, que, siendo pastor de condición muy humilde, vivió solitario en los bosques con la máxima frugalidad y, proclamando su fe en Cristo, consumó el martirio durante el imperio de Aureliano (273/274).
- En Sicilia, actualmente región de Italia, muerte de san Eusebio, papa, valeroso testigo de Cristo, que fue deportado por el emperador Majencio a esa isla, donde dejó la patria terrena para merecer la patria celestial. Trasladado su cuerpo a Roma, fue enterrado en el cementerio de Calixto (310).
- En Frisia, en territorio de la actual Holanda, san Ierón, presbítero y mártir, del que se refiere que recibió la muerte a manos de los paganos normandos (856).
- En Tesalónica, de Macedonia, en la actual Grecia, muerte de san Elías el Joven, que fue monje según las reglas de los Padres Orientales y, después de haber sufrido mucho por parte de los sarracenos a causa de la fe, con una fortaleza de ánimo invencible llevó una vida rigurosa de oración y austeridad, tanto en Calabria como en Sicilia (903).
- En Arcaria, cerca de Milazzo, en Sicilia, san Nicolás Politi, eremita, que llevó una vida de máxima austeridad, viviendo en una cueva (1107).
- En Colle Etrusco, cerca de Siena, en la Toscana, región de Italia, beato Alberto, presbítero, que dio al pueblo un magnífico ejemplo de virtud (1202).
- En Montefalcone, de la Umbría, también región de Italia, santa Clara de la Cruz, virgen de la Orden de los Eremitas de San Agustín, que estuvo al frente del monasterio de la Santa Cruz con un amor ardiente a la pasión de Cristo (1308).
- En Nagasaki, de Japón, santos mártires Jacobo Kyuhei Gorobioye Tomonaga, presbítero de la Orden de Predicadores, y Miguel Kurobioye, que, en tiempo del emperador Tokugawa Yemitsu, fueron condenados a muerte por su fe en Cristo (1633).
- En Saumur, cerca de Angers, en Francia, santa Juana Delanoue, virgen, que, apoyada totalmente en la ayuda de la divina Providencia, acogió primeramente en su casa a huérfanas, ancianas y mujeres enfermas y de mala vida. Posteriormente, puso con sus compañeras los cimientos del Instituto de Hermanas de Santa Ana de la Divina Providencia (1763).
- En el mar frente a Rochefort, en Francia, beato Natal Hilario Le Conte, mártir, que siendo clérigo de la catedral de Bourges y encargado de la música, fue confinado en una nave durante la persecución por odio a la religión, muriendo, por Cristo, aquejado de enfermedad (1794)
- En Castellfullit de la Roca, cerca de Girona, en España, beato Enrique Canadell, presbítero de la Orden de Clérigos Regulares de las Escuelas Pías y mártir, que sufrió la muerte por odio contra la Iglesia (1936).
(Del Martirologio Romano)